lunes, 5 de mayo de 2014

MIL AÑOS Y UN DÍA







¡Casi dos años!, es tanto tiempo que mejor sería borrón y cuenta nueva.
Ando más o menos igual que desde la última vez que escribí un post. Bien, gracias a Dios si no entramos en detalles, detalles que pincelan lo que de otra forma sería un cuadro vital muy aburrido.
¿Qué ha pasado? ¿qué no ha pasado? y qué pasó por mí o dejó de pasar también por mí ( no por mi persona sino por actuación u omisión mía)?...Uf, demasiadas preguntas.
Mi entorno ha crecido, y ¡de qué forma!...
Mis hijos: Uno termina ya la carrera, el viernes es la graduación, ahora vendrán los Masters y luego cambieremos la marcha para encontrar dónde trabajar. El otro anda muy encaminado con su carrera, empieza a enamorarse de lo que, para mí, es la profesión más bonita del mundo.
En cuanto a la otra parte que ocupa mi corazón, cada día nos queremos más, cada día nos necesitamos más y cada día es mejor que el anterior, cada día es nuevo y nosotros empezamos a ser un poco menos nuevos...
Sin embargo hay algo que no evoluciona, se estancó hace tanto...y es ese tanto por ciento que nunca he podido sobrellevar con gallardía, es lo que vuelve a mi cabeza en cuanto encuentra ocasión, lo que me condiciona para ser del todo feliz, esa sensación de culpa por omisión, ése sentir desprecio y al mismo tiempo nostalgia de algo que nunca fue verdad. Un amor nunca correspondido, porque está viciado desde un principio. Los celos, la envidia, las comparaciones, la "suerte" que trajo-atrajo la vida y que ahora muestra su cara más amarga : la soledad, y construye una barrera, un muro insondable que miente cuando parece que sonríe... No hay nada que hacer. Sobrellevarlo y ya está.
También ha habido sus sustos. Mala praxis, diagnósticos errados, que me han hecho cagarme encima mentalmente, subiendo parámetros analíticos que suben también por el estrés al doble en dos días. Pero afortunadamente, con un buen hacer y 90 euretes salimos de dudas. (Anda que , cuando lea esto pasados unos años y la atrofia neuronal me invada, me voy a preguntar : ¡¿de qué diablos hablo?!).
En resumen: sin novedad. Y que voy a intentar acualizar más a menudo.Ah, y ¡a dieta!, eso no cambia ni adelgazando, jaja...
¡Hola de nuevo si me lees!.

No hay comentarios: