jueves, 14 de octubre de 2010

A PILAR PÉREZ. (DIRECCIÓN: EL CIELO)

El martes mi Madre,como cada 12 de octubre ,llamó a su amiga Pilar para felicitarla,y se encontró con un "se murió en junio"...
En la Residencia donde vivía no deben tener mucho tacto, me parece a mí, porque le impactó mucho la noticia... La pobre se hinchó a llorar...Se conocían desde niñas,ambas han pasado de 80 años.Estudiaron la carrera de piano juntas y su amistad iba más allá de lo cotidiano.
Pilar era una almica de Dios.No fue monja de clausura por ser diabética,siempre con las subidas y bajadas y la insulina a cuestas, y porque cuidó de Paquico, su hermano bueno a rabiar, algo retrasado...
Pilar está en el cielo, es de las que llevan un cohete instalado al nacer que se prende con el último suspiro, yo creo que ni San Pedro se da cuenta de la gente que entra así en el cielo, son los sin papeles que llamo yo: no necesitan burocracia, el sello que confirma que se liberaron de su cuerpo y nada más...
Querida Pilar Pérez:
Muchas gracias por tu ejemplo,por tu serenidad ante tantas batallas que te tocó vivir, por tu desprendimiento, por ese tono siempre amable, por tus oraciones,por tu fidelidad ante lo divino y ante lo humano.
Habrá quien piense que tu vida fue estéril, nada más lejos...Fuiste, eres un pedazo de soldado de Cristo, y fue con tu anonimato como dejaste estela en tanta gente...Seguro que ahora estarás muy ocupada, porque debes tener ese cargo importante que en la tierra no se veía.Siempre discreta, siempre dulce,siempre solícita...
Un beso grande, querida Pilar (y no te digo ná..jajajaja).